LA RESISTENCIA DE LOS INCAS DESPUÉS DE ATAHUALPA. II


 Por : César Huertas

Dueños de la comarca, los pizarristas organizaron acometidas contra Manco Inca en Vilcabamba. Por otro lado, hay que mencionar que parte de la nobleza incaica en Cusco, hermanos de Manco Inca, tomaron partida por los pizarristas, entre ellos Paullu Inka, Inguill y Huaspar, quienes participaron en las tropas hispanas – indígenas. Éstas son inicialmente derrotadas por las tropas incaicas y Manco Inca ejecuta a sus hermanos Inguill y Huaspar frente a las protestas de Curo Ocllo, hermana de los ejecutados y esposa de Manco Inca

La fratricida guerra entre Atahualpa y Huáscar parece que no había terminado, pese a tener un enemigo común. Pareciera que esta situación también se repite en varios capítulos de nuestra historia.

Sin embargo, poco después, Vilcabamba fue arrollada por Gonzalo Pizarro, Manco Inca logró escapar, pero su esposa Curo Ocllo es atrapada y después ejecutada. Vuelto a Vilcabamba, Manco Inca recibió siete almagristas derrotados de la Batalla de las Salinas, que le prometieron servirlo y enseñarle usos de guerra como el manejo de caballos y armas de fuego.

Una vez alcanzada la confianza, fue asesinado por los almagristas durante un juego del herrón. Todo visto por su hijo Titu Cusi (14 años) – que había sido liberado del Cusco y más tarde sería cronista – Felizmente los siete traidores fueron alcanzados por miembros del sequito de Manco Inca y luego ajusticiados.

Manco Inca cayó en su propia trampa, después de haber confiado en los hispanos que lo iban ayudar a gobernar el Imperio de los Incas y estar encerrado en el Cusco, había dicho que nunca confiaría en ellos.

La corte de Vilcabamba eligió a Sayri Tupac – hijo de Manco Inca y Cura Ocllo, apenas de 9 años, con un tutor - como el nuevo Inca, en vista que Titu Cusi era hijo de otra mujer.

Durante el mandato de este nuevo Inca fue una etapa de paz con los hispanos. Como era joven le ofrecían casas y tierras cerca al Cusco para que deje Vilcabamba, es más, por una invitación llegó hasta Lima en 1560, a entrevistarse con el Virrey Andrés Hurtado de Mendoza. Al final de entrevistas y ofrecimientos, renunció a ser Inca Sapa (1), se volvió cristiano y acepto una gran propiedad en Yucay (valle Urubamba). Se casó con una hermana y tuvo una hija Beatriz Clara Coya, protagonista más adelante de sucesos importantes.

Sayri Tupac nunca regresó a Vilcabamba y murió prematuramente en 1561. Titu Cusi Yupanqui, su medio hermano, tomó de facto el control de Vilcabamba, convirtiéndose en el 3er Inca Sapa de Vilcabamba, éste sospechaba que su medio hermano había sido envenenado.

A diferencia de Sayri Tupac, Titu Cusi era beligerante, más aún que había visto como los hispanos habían traicionado la confianza de su padre y lo habían asesinado, en su propio hogar durante un juego.

Titu Cusi, al igual que Manco Inca comprendió que un enfrentamiento frontal contra los hispanos no tendría éxito por lo que emprendió una guerra de guerrillas contra ellos, además afianzó su zona cultivando muchas tierras, cuyos productos eran vendidos en varias partes logrando cierta riqueza. No obstante, era un peligro para los hispanos tener un reino cercano autónomo, por lo que luego de tratativas entre ambos bandos, firmaron el Tratado de Acobamba en 1566, autorizado por Felipe II.

Tratado importante, a través del cual se hacían concesiones mutuamente, en principio el cese de hostilidades, Titu Cusi continuaba siendo Inca Sapa lo mismo que sus descendientes – esto era muy importante para Titu Cusi – además permitió también el ingreso de misioneros a Vilcabamba.

El Inca mantenía su soberanía. Escribió una carta al rey Felipe II donde acusaba a los hispanos de todos los abusos que habían cometido desde su llegada. En el fondo quería dejar un mensaje para la posteridad.

Titu Cusi murió en 1570, probablemente por una pulmonía, sin embargo, su corte suponía que había sido envenenado por los misioneros, por lo que fueron ajusticiados al igual que otros hispanos y mestizos que se encontraban en Vilcabamba, y nuevamente comenzaron las luchas.

La corte nombró a Tupac Amaru I – hijo menor de Manco Inca y Curo Ocllo – quién debía haber sucedido a Sayri Tupac, convirtiéndose en el 4to Inca de Vilcabamba en 1571.

El nuevo Virrey Francisco de Toledo fue con todo contra esta nueva rebelión, se había quebrado el Tratado de Antabamba y sus embajadores habían sido ejecutados. Pese a contar con menos medios, los incas se defendieron bravíamente, habiéndose dado un caso de un mano a mano entre el capitán hispano Martín García de Loyola (2) con el capitán Inca Huallpa. Casi vencido Loyola, Huallpa fue atacado a traición por un indígena aliado, acuchillándole primero los pies y luego la espalda (Crónica de Martín de Murúa)

Las tropas incaicas fueron retrocediendo hasta Vilcabamba, donde terminaron de ser derrotadas. Tupac Amaru I, familia y seguidores huyeron a la selva, poco después fueron capturados. El 24 de septiembre de 1572 fue ejecutado en el Cusco en la presencia del mismo Virrey Toledo y de una multitud de personas que lamentaban la muerte de su Inca, terminando con esta acción los Incas de Vilcabamba que duraron 40 años después de la muerte de Atahualpa.

Tuvieron que pasar 200 años para que José Gabriel Condorcanqui, Tupac Amaru II, descendiente de Tupac Amaru I, iniciara mediante una revolución el largo proceso de la Independencia del Perú.

 

(1)          Sapa Inca, nombre que se asignaba al soberano del Imperio incaico

(2)          El capitán Martín García de Loyola se casaría en 1572 con Beatriz Ñusta, hija de Sayri Tupac, como recompensa en su acción contra Tupac Amaru I

Comentarios

  1. Muy interesante y grandes aporte porque nos ayuda ampliar nuestros conocimientos sobre los pasajes de nuestra historia.

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  2. Muy interesante, la Historia así narrada, estimula el análisis y desarrollar hipótesis al respecto, buscando la causa u origen de los hechos, despertando el espíritu crítico.

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