¿POR QUÉ NO HUBO JUNTA DE GOBIERNO EN LIMA?

Por: César Huertas

Lo que siempre hemos sabido es porque Lima constituía el baluarte militar y cortesano de la corona hispana en toda la América del Sur, al igual que México en el hemisferio norte.

Esta respuesta que nos han enseñado es cierta, pero lo que propongo en este artículo es que hubo otras consideraciones para que no lo hiciera y lo más grave, las consecuencias que tuvo Lima y el Perú al no haber constituido Juntas de Gobierno como los otros países, en 1810.

Recordemos que ante la invasión de Napoleón a España en 1808 y la captura de su rey Fernando VII, el reino de España quedo acéfalo, de la misma manera que sus propiedades de ultramar. Ello ocasionó un gran desconcierto y una gran desazón en la población hispana y americana; no obstante que Napoleón había colocado a su hermano José, como rey de España.

La reacción española no se hizo esperar y se formaron Juntas de Gobierno en diferentes provincias de España para dar continuidad a su marcha administrativa así como dirigir las guerrillas contra los franceses. Era además una forma de no reconocer al rey nombrado.

Estas Juntas de Gobierno más adelante se centralizarían y tendrían una Regencia en Sevilla, que pasaría poco después a Cádiz, por la ocupación territorial francesa.

De manera análoga, las ciudades de Sudamérica formaron Juntas de Gobierno, que inicialmente proclamaban no reconocer al rey José (francés) sino a Fernando VII, preso en cárcel dorada en Francia.

Juntas importantes que comenzaron a instalarse a partir de 1808 : Caracas, Bogotá, Quito, Buenos Aires, La Paz, Chile, aparte de otras ciudades de menor importancia. Estas Juntas desconocían al rey usurpador y a la Regencia de Cádiz, por consiguiente, desconocieron a sus autoridades inmediatas, Virreyes o Capitanes, poque asumían que esas autoridades ya no representaban al rey ausente.

Estas Juntas fueron reprimidas militarmente por las tropas acantonadas en dichas ciudades, menos la de Buenos Aires. Y esas derrotas posibilitaron la maduración de las ideas libertarias de los americanos e independencia de la metrópoli. Por lo que porfiaron en restablecerse como Junta de Gobierno, cada vez que lo conseguían, estableciendo una larga y sangrienta lucha para conseguir sus objetivos, así Caracas y Bogotá, durante 10 años, Chile en 8 años. Hasta que lograron sus independencias.

A diferencia de lo que sucedió en Lima y otras ciudades del Perú, salvo las excepciones de Huánuco en 1812 y Cuzco en 1814, que formaron Juntas de Gobierno pero que rápidamente fueron reprimidas.

El Virreinato del Perú bajo el gobierno de Fernando de Abascal fue el soporte represor durante varios años contra los movimientos independentistas de los otros países, así envió tropas, en su mayoría peruanos, contra Chile, derrotando a O’Higgins y Carrera, restaurando el régimen hispano; contra Quito y Chuquisaca, restableciendo las autoridades hispanas; contra los rioplatenses que asediaban el sur de Bolivia para entrar al Perú, siendo derrotados, Castelli, Belgrano, Balcarce, todos rioplatenses, tanto por Goyeneche (peruano) y Pezuela (español) con tropas peruanas que se denominaba el Ejército Real del Perú.

Es decir, el Perú era el enemigo de los movimientos libertarios que buscaban la independencia y que sabían que el poder militar estaba concentrado en el Perú

Por otro lado, Abascal en Lima, confiscaba diarios, panfletos, encarcelaba conspiradores, activistas o algún noble con ideas libertarias lo deportaba, asignándole un trabajo en la metrópoli.

Pero había algo más. Lima era una ciudad cortesana y fidelísima a su majestad de España, un pensamiento liberal era como una deslealtad, como mencionan muchos viajeros extranjeros que estuvieron durante esa época en Lima, que era la ciudad donde más había calado el espíritu español. Tenía una nobleza con títulos de Castilla, mayor que en otros países; altos funcionarios que vivían muy bien, lo mismo que los miembros del alto clero y el Consulado (consorcio de exportadores e importadores).

Los limeños tenían muchas fiestas durante el año con diferentes diversiones y juegos de envite. Esta situación no pintaba bien para tener un espíritu revolucionario, que algunos lo tuvieron, pero no había una masa crítica en 1810, que se atreviera a hacer una Junta de Gobierno en Lima.

Recién en 1820, 1821, esa masa crítica aumenta (aunque no lo suficiente) y ya hay ideas liberales que incluyen el fomentar el libre comercio y no depender del monopolio y las reglas de España para poder desarrollarse. Bueno, estos diez años son los que nos sacaron en ventaja las Juntas de Gobierno como Buenos Aires, Chile, Caracas y Bogotá. En pocos años la prosperidad de Caracas y Buenos Aires fue en aumento

Lima, la opulenta y bella ciudad del Siglo XVIII, en 1821 estaba siendo superada por esas ciudades. Son diez años que la gente de esas ciudades aprendió a reclamar sus derechos, a compenetrarse en el libre comercio, crear mercados, a identificarse con la igualdad de derechos y a ver el fruto de su trabajo en franca mejoría de sus condiciones de vida. (Hall, pag 67)

Muy diferente el sentir de la burguesía limeña:

La prosperidad económica dependía no de la conquista de la plena libertad comercial, sino del retorno a las condiciones comerciales exclusivistas y monopólicas de la época colonial.De esta manera el pensamiento político de la nueva república mezcló dos conceptos: la república política, basada en la igualdad universal, y la desigualdad social como convicción. (Bonilla, Spalding pag 61)

Todo ello, trajo como consecuencia que esos nuevos países pudieran cimentar mejor sus nacientes gobiernos, pese a los problemas internos que acarrea todo inicio de un país.

BIBLIOGRAFIA

BONILLA , Heraclio; SPALDING  Karen. "La Independencia en el Perú: las palabras y los hechos". IEP, 1972

HALL, Basill. El General San Martín en el Perú. Extractos del Diario escrito en las costas de Chile y Perú, en 1820- 1821. Buenos Aires. 1917